DE SAN NICOLÁS A SANTA CLAUS
¿Os habéis preguntado alguna vez por el origen de Santa Claus? ¿Tiene algo que ver con San Nicolás de Bari? ¿Y con Papa Noel? Intentaré aclarar estas dudas en este artículo empezando por San Nicolás, el origen de toda esta historia.
SAN NICOLÁS DE BARI
San Nicolás nació unos 280 años después de Cristo y se convirtió en el obispo de Mira, una pequeña ciudad romana en la actual Turquía. Lo que hemos encontrado de él son datos difusos, cargados de leyenda y exagerados para conformar y realzar su figura, escritos siglos después de su muerte. De lo que sí estamos seguros es que se parecía poco al Santa Claus que conocemos hoy en día. ¿Pero, cómo fue esa metamorfosis? Sigamos con San Nicolás.
Sobre el año 1.200, según explicó el historiador Gerry Bowler, autor de Santa Claus: A Biography, se le empezó a conocer como patrón de los niños y portador de regalos mágicos. Según la leyenda, nuestro protagonista acababa de entrar en una posada donde el dueño había asesinado a tres niños y conservaba sus cuerpos desmembrados en barriles en el sótano. El obispo no solo descubrió el crimen, sino que también resucitó a las víctimas. «Fue una de las cosas que le convirtieron en el santo patrón de los niños». Desde entonces tiene su vinculación con los niños.
Nicolás fue perseguido y encarcelado en tiempos de Diocleciano hasta que el emperador Constantino aceptara el cristianismo como religión oficial.
Sabemos que murió un 6 de diciembre de un año desconocido, a mediados del siglo IV y ese día en muchos lugares se celebra su fiesta, como por ejemplo en Holanda.
Precisamente fueron los holandeses cuando emigraron a Nuevo Mundo quienes llevaron la figura y sus tradiciones allí, instalándose en 1621 en Nueva Ámsterdam (Manhattan). Su Santus Nicolaos va derivando fonéticamente a Santa Claus, y comienza la metamorfosis.
Retrocedamos a la Edad Media ¿por qué conocemos a nuestro protagonista como San Nicolás de Bari si hemos dicho que era obispo en Asía Menor? Pues porque tras la ocupación musulmana (1087) de Turquía unos marineros italianos llevan sus restos a Bari, temiendo por su expolio. Y se le siguen atribuyendo más milagros. Va ganado devotos, se convierte en patrón de Rusia, de Grecia, incluso los marineros lo veneran para conjurar las tormentas en alta mar. Su fama cada vez es mayor.
SIGLO XIX EN ESTADOS UNIDOS
Y es en el siglo XIX en Estados Unidos cuando se produce la gran metamorfosis que vino de la mano de autores claves como Washington Irving. En 1809 Irving escribió Knickerbocker's History of New York, una historia de Nueva York, en plan humorístico y paródico retratando, por primera vez, a un Nicolás que fumaba en pipa mientras sobrevolaba los tejados de las casas en un vagón volador repartiendo regalos entre los niños y las niñas que habían sido buenos.
Fue unos años después cuando se va perfeccionando su imagen y acercándose a la que conocemos hoy. En 1821, un poema anónimo titulado The Children's Friend fue mucho más allá a la hora de dar forma al Santa Claus moderno, asociándolo con la Navidad. Un año después, Clement Clarke Moore escribió A Visit From St. Nicholas, también conocido como The Night Before Christmas, para sus seis hijos, sin intención de sumarse al incipiente fenómeno de Santa Claus. Se publicó de forma anónima al año siguiente, 1823, y desde entonces conocemos a ese Santa Claus regordete y alegre que se describe en él montando en un trineo del que tiran ocho renos, entrando por las chimeneas y llenando de regalos los calcetines. Por cierto, en esa época todavía vestía de verde.
Fue en 1863 cuando en la revista Harpers aparece una imagen de Santa Claus tal y como le conocemos ahora mismo, con esa barba blanca y con traje de color rojo y blanco. El mayor responsable de la cara alegre, regordeta y de abuelo de este Santa Claus fue Thomas Nast, un gran caricaturista político. Todo esto más las leyendas de gnomos y elfos dan lugar a la metamorfosis total en un anuncio de Coca Cola de 1931.
UN MITO, TRES MITOS
Había nacido el mito moderno, pero un mito no uniforme porque tenía tres ramificaciones: el Santa Claus estadounidense, el San Nicolás holandés con otras características y el Papa Noel francés. De hecho, cuando la figura de ese Santa Claus se consolidó se experimentó una especie de migración a la inversa hacia Europa adoptando nombres locales como Père Noël en Francia, Father Christmas en Gran Bretaña o Papá Noel en España.
Y hablando del Papá Noel francés, no sé si sabéis que en 1951 hubo una revuelta en Francia que acabó con Papá Noel ahorcado y quemado. Sucedió el 23 de diciembre de 1951 en la ciudad francesa de Dijon, frente a su catedral. El motivo, una cuestión religiosa, al considerar la iglesia que se profanaba la figura y nombre de San Nicolás y que esa figura que entraba en las casas dejando regalos era una intrusión pagana en las tradiciones católicas. La ciudad se dividió en defensores de Papá Noel y en los que lo consideraban un hereje. Se le llegó a quemar en el atrio de la catedral bajo la mirada de 250 niños estupefactos, resultó un acto simbólico de mucha trascendencia apareciendo incluso en la prensa del día siguiente. El Ayuntamiento entra en juego en oposición al acto bárbaro y fanático del clero y hace resucitar a Papa Noel para que pueda seguir dejando regalos en las casas de los niños.
Continuando con la configuración de mito moderno solo faltaba para rematarlo establecer su vivienda donde los niños pudieran enviar sus cartas. Aquí es donde entra la parte comercial. Si la figura se transportaba en un trineo con renos ese lugar debía estar en algún lugar con mucha nieve. Y fue Eleonor Roosevelt, delegada de la comisión de Derechos Humanos de la ONU quien inaugura en 1950 la casa y sede oficial de Santa en Rovaniemi (Laponia).
Bueno, espero que os haya gustado y que la mañana del día 25 os encontréis el calcetín lleno de juguetes.
Canal de Podcast SER Historia Cronovisor San Nicolás-Santa Claus Nacho Ares y Jesús Callejo
¡Buen post! Esta mágica época de Navidad nos recuerda que los pequeños milagros están en todas partes. Las luces brillan más, los corazones se ablandan y cada momento compartido es un hechizo de alegría y amor.
ResponderEliminarGracias
ResponderEliminarqinera.com
ResponderEliminarLos juegos didácticos son regalos ideales para Navidad. Ayudan a desarrollar habilidades mientras entretienen a los niños, convirtiéndose en opciones educativas y divertidas que encantan tanto a los pequeños como a los padres.